La competencia sana en los niños es una manera didáctica de educar

Cuando tenemos que educar niños, debemos considerar que son pequeños en formación y que debemos prepararlos para la vida adulta. Una de las herramientas más amenas que podemos utilizar para que nuestros niños comprendan todo el universo que es crecer y enfrentarse a un mundo competitivo lleno de retos y desafíos es la competencia.

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Pero cuando hablamos de competencia nos referimos específicamente a una competencia sana y didáctica, la cual ayude a potenciar las habilidades y talentos de los niños, mientras que al mismo tiempo pueden disfrutar de la experiencia que están viviendo. A través de esta herramienta los niños podrán desarrollar la resistencia, la perseverancia y la tenacidad, además de la tolerancia a la frustración.

Algunas técnicas para fomentar la sana competencia en los niños

1.- No enseñarles a ganar, si no que a dar lo mejor de sí mismos

Es muy importante que cambien el foco de atención en esta situación específica, si les decimos que deben ganar se van a sobre estimular y pueden que terminen precipitándose demasiado, lo cual los lleve a perder y por consiguiente a creer que el perder te transforma en un perdedor, lo cual claramente afecta su autoestima.

Más bien debemos enfocarnos en guiarlos a dar lo mejor de sí mismos, lo cual claramente le ayudará a mantener la calma y a comprender que al dar lo mejor de ti logras concentrarte mejor y por consiguiente disfrutas de la experiencia, en este caso si llegas a perder no importa, toda vez que te has divertido y te sientes conforme con haber dado tu mejor esfuerzo.

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2.- Enseñarles a conocer sus límites

En las áreas que no son del agrado de una persona es bastante difícil que se pueda desarrollar a plenitud y que pueda disfrutar de la experiencia. Esto no quiere decir que se deba simplemente pensar en "si no me gusta no lo hago", claro que no, pero sí debe aparte de dar lo mejor de ti mismo, estar consciente que no todos somos talentosos en todas las cosas y que así como destacamos en algunas, también otras nos cuestan más.

En este caso lo importante es enseñarle a mantener una práctica constante en aquellas áreas que se le dificultan.

3.- Fomentar los valores mientras están en competencia

Si al momento de competir les mostramos que la solidaridad y el trabajo en equipo son más fuertes que ser agresivo o egoísta, ellos verán con el ejemplo y sus acciones como pueden llegar a una victoria a través del desarrollo de valores al mismo tiempo que están compitiendo.

4.- Entregar nuestra enseñanza a través del ejemplo

Si los pequeños ven que somos capaces de competir sanamente y que además podemos aceptar nuevos retos constantemente, ellos al menos tendrán la noción de que es posible hacerlo. Aun así puede que esto no genere que ellos deseen competir, pero al menos si estarán en conciencia del hecho de que al buscar nuevos retos se rompen y quiebran los límites y las barreras.

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5.- Ser un coach con ellos y no una figura impositiva

Si somos capaces de convertirnos en un facilitador para ellos, en un apoyo y una palabra de aliento, entonces ellos sentirán seguridad al momento de competir y esto los hará más tenaces y mejorará su determinación.

Como tips final, puedo recomendar que una de las formas más didácticas de generar competencia en los niños es con juegos. Hoy en dia esta muy de moda la figura del gamer o el video juego, esto ayuda bastante a nuestro niños a mejorar su motricidad, su capacidad de respuesta, su instinto de supervivencia, su concepto de liderazgo, la autocrítica, la atención, la creatividad y la memoria visual, entre otras cosas.

Claramente se recomienda realizar este tipo de estrategias siempre y cuando se hayan seguido los 5 pasos anteriores, si no es así solo logramos frustrar y sobre estimular a los pequeños.

Carolina Vega Espinoza