La experiencia que he adquirido a través de los años, desde profesora, entrenadora y técnica deporiva me enseñaron a diferenciar cuando se dicta clases a un bebe, niño, adolescente o adultos.
Cuando dicto clases a un niño o bebé (desde los 6 meses), mi clase es súper dinámica, es cantada y lúdica, siempre orientada al mismo objetivo aprender a nadar pero sobre todo aprender a sobrevivir si es qu...
La experiencia que he adquirido a través de los años, desde profesora, entrenadora y técnica deporiva me enseñaron a diferenciar cuando se dicta clases a un bebe, niño, adolescente o adultos.
Cuando dicto clases a un niño o bebé (desde los 6 meses), mi clase es súper dinámica, es cantada y lúdica, siempre orientada al mismo objetivo aprender a nadar pero sobre todo aprender a sobrevivir si es que se caen a un piscina muy onda y no hay nadie cerca. El material que utilizo son juguetes diversos flotantes y sumergibles. Siempre busco que el niño (a) y bebé sientan la confianza necesaria hacia mi para que el aprendizaje sea más fácil.
En el caso de un adolescente es diferente, mi clase sigue siendo dinámica y lúdica, en este caso son orientados a objetivos específicos planteados en el día a día u objetivos propios que tenga el alumno/a, eso sí con ellos sigo conservando la relación de confianza que es de suma importancia.
Si hablamos de adultos y adultos mayor todo cambia ya que aún mantengo la clase dinámica pero es más técnica y dependiendo del objetivo del alumno/a siempre manteniendo la relación de confianza.
Recuerden esta clasificación en cuanto a las edades:
SWIM BEBE: de 6 meses a 4 años
PRE MINIMA: 5 a 6 años
MÍNIMA: 7 a 8 años.
INFANTIL A: 9 a 11 años
INFANTIL B: 12 a 13 años
JUVENIL A: 14 a 15 años
JUVENIL B: 16 a 17 años
ADULTOS: 18 años a más
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